domingo, 3 de mayo de 2009

Un Lecce luchador enmudece al Olímpico de Turín

Sorpresa, sorpresa. Jornada de la liga italiana eclipsada por el derbi español (y por la magia del Barça). Una liga casi decidida (en los mismos términos que la española) no invita a emocionarse. Todas las miradas este fin de semana se centraban en el Santiago Bernabeu, pero si se le echaba oído se podía escuchar a los animales del fondo sur del esradio de la Castellana insultando a Eto'o y a Henry por su color de piel. Este detalle nos recordó a algo. ¿Pero de qué se trataba? De la famosa sanción a la Juventus por gritos racistas hacia Balotelli. Y una vez más una acción tan repudiable se queda sin sanción. Los tribunales deportivos vuelven a dejar impune a aquellos que muestran violencia o falta de respeto en los campos. Veremos como termina este deporte.
Así, los aficionados turineses pudieron ver a su equipo frente a un Lecce que se aferra desesperadamente a la categoría. Y quizás alguno pensaría que hubiese sido mejor no asistir porque la Juve se está hundiendo en este final de temporada. Nadie esperaba el final por 2 a 2 por el gran juego juventino, pero es que la suerte de la Vecchia Signora parece haberse agotado. En los últimos encuentros contra rivales teóricamente fáciles el equipo de Claudio Ranieri ha dejado escapar muchos puntos cruciales en los últimos minutos, tantos que bien valían el Scudetto o la segunda posición.



Pavel Nedved se convirtió en el salvador de los blanquinegros
Imagen de la página oficial de la Juventus de Turín


Y todo empezó mal para los de Piamonte, pese a que la primera gran oportunidad fue suya, se adelantó el Lecce en el minuto 11' por mediación de Koran, que partía en posición de fuera de juego, hecho que ha convertido al resultado en polémico. Pero apareció quién en su día fue la gran estrella de la Juve. Nedved dio la vuelta al resultado con dos tantos en los minutos 55 y 67. La calma se instaló en el Comunale. El equipo local jugaba muy bien y controlaba todas las acciones. Es más, contó con diferentes ocasiones para rematar el encuentro. Pero quien perdona en fútbol lo paga.
El Lecce se veía en la Serie B y tiró de casta. Avasalló la portería de Buffon en los últimos minutos, teniendo que hacer el portero un par de paradas impresionantes. Y por fin el equipo visitante sacó petroleo, ya que empató con un testarazo de Castillo en el minuto 94. La desilusión llegó al Olímpico, los aficionados no lo podían creer, era demasiado castigo. El fútbol es sabio y cruel porque los rivales directos de la Juve (Milan a Inter) vencieron sus respectivos encuentros.
La temporada ya está perdida, sólo queda soñar con el año próximo y con la vuelta de Fabio Cannavaro.

1 comentario:

Ainhoa Delgado Fernández dijo...

Hola lofff!
Mira he encontrado esto. No sé si te servirá, no habla de la Juve pero sí del fútbol italiano.

http://es.eurosport.yahoo.com/futbol/ruben-uria/article/1565/


Adéu!